GOBIERNO, NACIÓN Y PUEBLO

    El concepto de gobierno ya fue definido anteriormente en este blog; sin embargo, es importante aclarar otros términos que suelen confundirse, como nación y pueblo. Según lo mencionado por Dardón (2021), la palabra nación puede confundirse con el elemento constitutivo población, aunque no significan lo mismo. La nación se refiere a una comunidad humana unida por vínculos históricos, culturales, lingüísticos y espirituales comunes, más allá de las fronteras políticas. En cambio, el pueblo es el conjunto de personas que integran un Estado en un momento determinado y que ejercen la soberanía a través de mecanismos como el voto. Entonces, con lo mencionado se muestra una matriz con 3 diferencias y 3 semejanzas entre estos 3 conceptos.

Aspecto	Gobierno	Nación	Pueblo
Diferencia 1	Es un órgano del Estado encargado de ejercer el poder.	Es una comunidad cultural, histórica y espiritual.	Es el conjunto de personas que habitan el Estado.
Diferencia 2	Cambia con los procesos electorales.	Permanece en el tiempo, incluso sin Estado propio.	Tiene participación política directa (por ejemplo, votando).
Diferencia 3	Tiene funciones administrativas y de dirección política.	No ejerce funciones de gobierno.	Ejerce la soberanía mediante mecanismos democráticos.
Semejanza 1	Forma parte del Estado y actúa en su nombre.	Puede coincidir con los límites del Estado.	Es uno de los elementos fundamentales del Estado.
Semejanza 2	Su legitimidad depende del pueblo.	Puede dar origen al sentimiento de unidad nacional.	Comparte identidad con la nación en muchos casos.
Semejanza 3	Tiene un papel clave en la organización del país.	Puede contribuir a la estabilidad del Estado.	Es la base sobre la que se constituye y sostiene el Estado.

 

    Según el autor Gayubas, existen diversas formas de clasificar los gobiernos, muchas de ellas con origen en la Antigüedad. Una clasificación puede hacerse según cómo se accede al poder: si el jefe de Estado es elegido por el pueblo, es una república; si hereda el poder, una monarquía; y si lo toma sin respetar mecanismos institucionales, una dictadura. Otra clasificación se basa en el grado de libertad y participación política, distinguiendo entre democracias, autoritarismos y totalitarismos, dependiendo del respeto a los derechos y libertades. Finalmente, también pueden clasificarse según el vínculo entre el jefe de Estado y el Parlamento, diferenciando entre régimen presidencialista y parlamentario.

    En este orden de ideas, La nación puede clasificarse principalmente en dos tipos: nación cultural y nación política. La nación cultural se basa en elementos como la lengua, la religión, la historia y las tradiciones comunes que unen a un grupo humano, independientemente de que posean un Estado propio. Por otro lado, la nación política hace referencia a una comunidad que, además de compartir ciertos rasgos culturales, se organiza políticamente dentro de un Estado y ejerce soberanía. Ambas formas pueden coincidir o no en un mismo territorio.

    Por último, los pueblos; que pueden clasificarse según distintos criterios, entre ellos su grado de organización y participación política. Así, se puede hablar de pueblos originarios o indígenas, que conservan estructuras sociales, culturales y jurídicas propias; pueblos soberanos, que según el Equipo de Enciclopedia Significados define como “aquel país o nación que cuenta con un gobierno independiente y que, en virtud de esto, tiene plena potestad para ejercer la autoridad suprema dentro de su territorio.”; y pueblos sometidos o colonizados, que carecen de autonomía y están bajo el control de otro poder. Estas clasificaciones permiten entender la diversidad y situación política de las comunidades humanas a lo largo del tiempo y en distintos contextos.